PREGUNTAS FRECUENTES SOBRE EL VINO

¿Qué son las cepas del vino? ¿De dónde se obtiene el color tinto, rosado o blanco en un vino? ¿Todos tienen las mismas características?

Las cepas son las diferentes variedades del vino, ya sea Malbec, Tannat, Chardonnay, entre otras. En la actualidad se encuentran registradas más de 4.500 variedades de uva en el mundo. Conocidas como cepajes, varietales, cepas y un sinfín de acepciones, las variedades de uva se dividen en dos grandes grupos: blancas y tintas. Cada una de ellas posee un ADN que las identifica y que, una vez finalizado el proceso de elaboración de un vino, ofrece características de color, aroma y sabor únicas. Ya desde el viñedo se pueden apreciar sus características de acuerdo al tamaño del racimo, sus granos, el grosor y tonalidades de su piel.

En cuanto al color, este lo aporta la piel de la uva, a partir del proceso de maceración (contacto de la piel con el jugo de uva en la elaboración). Por lo tanto, dependerá del tipo de uva que se elija a la hora de elaborar el vino.

Vinos blancos: La diferencia más importante que presenta el vino blanco con respecto al vino tinto, es la ausencia casi total de maceración. Los vinos blancos se pueden elaborar a partir de uvas blancas o de uvas tintas vinificadas “en blanco” (se extrae la piel rápidamente para no teñir el jugo).

Vinos Rosados: Se utilizan uvas tintas y se interrumpe la maceración en algún estado intermedio, antes de que termine de ceder la mayoría de sus materias colorantes. También hay rosados de mezclas o “blend” en inglés.

Vino tinto: Elaborado a base de uvas tintas, con una maceración completa.

De una misma uva podrán salir diferentes estilos de vino, cada uno con la identidad de su elaborador.

Todas las variedades tienen distintas características y niveles de intensidad. Por ejemplo:

Tintos corpulentos de alta intensidad: Tannat, Cabernet Sauvignon, Carmenère, Petit Verdot, Syrah.

Tintos de intensidad media: Malbec, Syrah, Petit Verdot. Cabernet Franc, Merlot.

Tintos sutiles y livianos: Pinot Noir, Sangiovese.

Blancos con posible untuosidad: Chardonnay, Viognier, Moscatel, Albariño.

Blancos refrescantes, con marcada acidez: Sauvignon Blanc, Torrontés, Riesling.

Vinos dulces: Independientemente de la uva base, son considerados dulces los vinos fortificados con alcohol como el Oporto o Mistela, vinos de cosecha tardía o dulces naturales y todos aquellos que contengan un azúcar residual superior a 45gr por litro, el cual estará especificado en la etiqueta.

¿Qué significa la palabra “blend” o “varietal” en una etiqueta?

Si bien existen infinidad de tipos y variedades de vinos, se los puede clasificar en dos grandes grupos:

Vinos de corte: Se denominan a aquellos que han sido elaborado con más de una variedad, que no suelen detallarse siempre en la etiqueta. Es decir que se han combinado las virtudes de dos o más cepas para obtener un "vino de corte". Estos vinos son los conocidos como "blend”. Lo que se busca es que cada variedad aporte lo suyo.

Vinos Varietales: Son aquellos vinos que han sido elaborados solo con una variedad de uva o al menos en un 85%, el cual debe mencionarse en la etiqueta. Es interesante descubrir en ellos las características típicas de cada variedad: su color, sus aromas o las sensaciones que provoca.