¿Querés un Aire Acondicionado, pero no sabés qué tener en cuenta para elegir la mejor opción?

 

¡Te detallamos toda la información necesaria para tomar la decisión correcta según tus gustos y necesidades!

 

Tipos de Aires Acondicionados

 

On/Off

Se configuran para emitir frío o calor (según desee el usuario) hasta alcanza la temperatura buscada. Cuando se consigue, el motor del dispositivo se detiene. Por lo tanto, al dejar de emitir calor/frío, la sala se enfriará y/o calentará. Sin embargo, cuando se pierdan algunos grados de los marcados por el usario, comenzará a trabajar nuevamente. 

Es de fácil instalación y mantenimiento, dado que cuenta con pocos componentes para su funcionamiento. Esto disminuye costos.  Como desventaja, se nota un consumo mayor de energía que los Inverter.

 

Inverter

Trabaja con una tecnología de “auto regulado”. Es decir el dispositivo mide la temperatura del lugar y se regula a partir de la misma. Se debe configurar con la temperatura deseada en el ambiente, y el aire aumentará o disminuirá la potencia del aire para obtener la temperatura indicada. 

Entre sus ventajas se destaca el funcionamiento más optimizado del dispositivo, que se puede ver reflejado en un ahorro de energía eléctrica a mediano plazo. Además, la temperatura es más estable, y el usuario no debe estar configurando de manera constante la temperatura. Esto también genera más vida útil del aire, dado que recibirá menos cambios que los on/off.  

 

Principales características

Capacidad de enfriamiento: Se refiere a la capacidad de refrigeración o calefacción de un aire acondicionado. En Uruguay se utiliza el BTU como herramienta de medición.

Nivel de ruido: Aunque parezca ser una característica menor, puede resultar una molestia constante cuando se utiliza el dispositivo a diario. Los aires acondicionados Split son los que generan menos ruido.

Instalación: La unidad exterior debe instalarse en un lugar ventilado. Es importante que el aire acondicionado no sea un obstáculo a la entrada y salida de aire del área.

Mantenimiento: Es clave revisar y limpiar los filtros del aire, ya que estando sucios pueden incrementar el consumo hasta un 30%.

Características Relevantes

Niveles de Temperatura

Para utilizar el aire acondicionado de manera eficiente es clave situar la temperatura en un “set point”. En inverno, se dice que la temperatura no debe variar de entre los 21° a los 23°. Es decir, no es necesario poner el aire acondicionado a altas temperaturas dado que el mismo dispositivo se irá prendiendo y apagando a medida que regule la temperatura del ambiente.

El “set point” favorece también al choque térmico cuando salimos de nuestros hogares. Otro dato para tener en cuenta es que por cada grado que se aumenta en cualquier sistema de calefacción, se gasta un 5 o 10 porciento más de energía. Esto se da porque al dispositivo le cuesta más generar calor mientras más alta se la temperatura que se le exige, y, además, pierde calor hacia el exterior dado el exceso.

En el verano, las temperaturas recomendadas son entre 23° y 25°.


Refrigeración con gases

El aire acondicionado tiene un ciclo de refrigeración que busca aumentar o disminuir la temperatura del interior respecto a la del exterior, y esto lo realiza a través de gases.

La función del gas es, entonces, enfriar o calentar el aire que recibe del exterior para poder expulsar ese aire frío o caliente dentro de la habitación.

El proceso consta de diferentes etapas. Primero, se comienza en el comprensor, que es una especie de motor permite la absorción del aire por parte del evaporador. Está ubicado en la unidad exterior de aire acondicionado.

Posteriormente, pasa a la función de evaporización, que implica absorber el aire exterior y transformarlo en frío o calor, según sea indicado por el usuario. Por último, el condensador libera el aire dentro de la habitación, y se expande en toda la zona.

Se recomienda que los aires acondicionados utilicen gases no corrosivos, inflamables o no tóxicos, y que sea amigable con el medio ambiente.


Eficiencia

Es la optimización del consumo de energía ajustado a las necesidades reales de los usuarios. Cuanto mayor sea la energía generada por cada kW gastado, más eficiente es un equipo.

Para medir esta optimización, se utiliza el índice de eficiencia energética, que se obtiene dividiendo la capacidad del equipo (watts o hrs) dividido la cantidad de watts que consume el mismo en una hora.

 

El aire acondicionado es el medio de calefacción más eficiente

Contamos con distintas fuentes de energía: electricidad, leña, supergás, gas natural, gasoil, entre otras. Estas las podemos utilizar para transformarlas en calor.

Para ello necesitamos de distintas tecnologías para transformar esa fuente en lo que creemos que es calor útil. En el caso de la electricidad tenemos las bombas de calor (calefacción general) y los aires acondicionados. Estos últimos entregan tres kilowatts de calor por cada kilowatt que se “compra” o “paga” de energía. Por eso es el sistema de calefacción más eficiente y económico en Uruguay.

A modo comparativo, un caloventilador o un radiador a aceite funcionan en un sistema de resistencia eléctrica y la entrega es de 1 a 1; por cada kilo “comprado”, el dispositivo entrega un kilowatt de calor. Por lo cual resulta tres veces más caro que un aire acondicionado.

A pesar de los altos costes de compra de un aire acondicionado, los expertos recomiendan esta inversión dado que se ahorrará en el gasto de electricidad mensual. Pero, a su vez, se debe tener en cuenta el tipo de aire que se compra para obtener los resultados buscados.

 

BTU

 

British Termal Unit, más conocida como BTU, es una unidad de medición que determina la cantidad de calor que una unidad de aire acondicionado puede extraer de una habitación.

A mayor cantidad de BTU, mayor será el enfriamiento/calentamiento. También, cuanto más alto sea el BTU, mayor es el tamaño, peso y coste del producto.

 

¿Cómo calcular los BTU ideales para tu habitación?

 

Para calcular los BTU se debe tener en cuenta el área de la habitación en la que se instalará el aire.

La base para el cálculo es el área del ambiente a climatizar. También se deberá tener en cuenta la altura de la habitación y, por último, la cantidad constante de BTU por cada metro cúbico (200).

Esto se resuelve en esta multiplicación: Longitud x Ancho x Alto x 200 = BTU.

Por ejemplo, si la habitación cuenta con 5 metros de longitud, 4 metros de ancho y 3 de alto, y a esto lo multiplicamos por 200, nos da 12. Por lo cual lo más acetado sería un aire de 12.000 BTU, y como segunda opción uno de 9.000 BTU

También se deben tener en cuenta la cantidad de personas que habrá dentro de la habitación. No es lo mismo una sala de estar que un dormitorio, por ejemplo.